Título original: F/X: Murder by Illusion
Año: 1986
Duración: 108 min.
País: Estados Unidos
Dirección: Robert Mandel
Guión: Gregory Fleeman, Robert T. Megginson
Con: Bryan Brown, Brian Dennehy, Diane Venora, Cliff De Young, Jerry Orbach
Grado: B+
Reseña: Hugo C
Alerta ochentoso: el tema de títulos de cierre de esta película es "Just an Illusion", del grupo Imagination. Con eso les digo todo.
Vi esta película en el momento de su estreno, en un cine de la calle Lavalle, en Buenos Aires, creo que era el Ocean, que estaba frente al glorioso Palacio de la Papa Frita ("donde siempre son las 12 para comer"). ¿Quedará algún cine en esa calle al que no hayan convertido en templo evangélico? Lo dudo. Pero en 1986 –hace ya 35 años– Lavalle era la "calle de los cines" y las salas solían tener nombres exuberantes: Monumental, Atlas, Iguazú… En fin. Vamos con la reseña, amigos.
Rollie Tyler es un técnico de efectos especiales. Trabaja mayormente en películas de clase B, le gusta su trabajo y lo hace bien. Su novia es una actriz desconocida pero con aspiraciones y su vida es como la de cualquiera de nosotros, o mejor dicho, como lo sería si uno fuese un técnico de efectos especiales que trabaja mayormente en películas de clase B, le gusta su trabajo y lo hace bien y tiene una novia que es una actriz desconocida pero con aspiraciones. Pero bueno, lo importante es que Tyler es un tipo común y corriente, no es John Wick ni mucho menos.
Un día Tyler recibe un encargo de una agencia del gobierno: "matar" a un testigo clave en un juicio contra la Mafia. Por si las comillas no son lo suficientemente explícitas, la muerte del testigo va a ser de mentiritas. La idea es que los mafiosos lo den por muerto y pueda declarar en paz. Para alguien con los conocimientos de Tyler sería un trabajo más: una pistola con balas de fogueo, un chaleco con sangre falsa, en fin, lo que hemos visto en decenas de películas.
Tyler hace lo que cualquier espectador que estuviese en sus zapatos hubiese hecho: rechaza el encargo de plano, y les dice algo así como: ¡Ni a palos!, aunque en su idioma natal y con el acento australiano que lo caracteriza. Los federales le dicen que está bien, lo entienden, y ahora váyase que vamos a llamar a su colega Juan de los Palotes para que haga el trabajo. Al oír el nombre de Juan de los Palotes, Tyler siente un arranque de celos profesionales y acepta. No hace falta ser Horangel para pronosticar que las cosas no saldrán exactamente según lo previsto y Tyler tendrá que aplicar sus conocimientos para salvar lo que queda de su vida. Eso sí, quien la sacó baratísima es Juan de los Palotes, que no tuvo que involucrarse en el asunto. Supongo que se habrá ido a comer unos alfajores, o algo así.
F/X es una película chiquita pero efectiva, bien hecha, redondita, que no hace agua por ningún lado. Cero CGI, todo artesanal, y por eso mismo es casi un documental sobre cómo eran los efectos especiales por aquel entonces. (El asesor de efectos en la película es nada menos que John Stears, que participó en más de media docena de películas de James Bond y ganó sendos premios Oscar por su trabajo en Thunderball y Star Wars.) La música es de Bill Conti, quien diez años antes había musicalizado a Rocky, ganadora del Oscar por mejor película.
La historia no es demasiado original –es básicamente un telefilme llevado a la pantalla grande–, pero hace hincapíé en cómo Tyler se las rebusca usando su bolsa de trucos sin forzar demasiado la lógica de la situación. Él no es MacGyver, que te arma una bomba atómica con un envoltorio de goma de mascar y la pulpa de dos naranjas, sino alguien que conoce su oficio y le saca provecho. Lo que levanta el puntaje de F/X es el elenco, que no tiene ninguna superestrella pero es más que competente, y si uno se aburre, puede jugar a reconocer dónde vio antes a cada uno de los actores.
- ¿Ése no era el cantinero que revoleaba la coctelera en esa película con Tom Cruise?
- Al pelado lo vi en una de Schwarzenegger.
- ¡Epa! ¡Ése es el comisario de la primera de Rambo!
- Me parece que el mafioso es el mismo actor que hacía de detective en La ley y el orden.
F/X no fue un éxito absoluto de taquilla pero hizo 20 millones de dólares con un presupuesto de 10. Después hubo una secuela, no tan buena, y una serie de TV realmente abominable, pero esta película, la original, aún hoy se deja disfrutar sin problemas.
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